miércoles, 26 de mayo de 2010

DIALOGO GENERACIONAL: Por Jorge Huertas





                     

 

                             Diálogo Generacional

 

Al estudiar la historia o mejor dicho, al estudiar la historia escrita nos damos cuenta que en cada periodo resaltado prevalecen los principios y conceptos establecidos y legitimados por el consenso de la generación que en esa época le toco asumir la conducción del país.

 

 

Con esto de generación no estoy hablando solo del sector Estatal o de gobierno, no, estoy hablando de una generación que dirige un país en lo público, en la sociedad civil, en lo privado, etc. En todos los ámbitos sociales establecidos para la participación del liderazgo.

 

 

Entre los principios y conceptos establecidos por las diferentes generaciones en la historia de nuestro país, se encuentran varios resaltados, como ciertos conceptos básicos de Estado y su origen, función y utilización. Se tenía alguna noción de proyecto político, en fin, existía una mística más ordenada del liderazgo.

 

 

Quiero aclarar que no estoy valorando estos principios o conceptos de buenos o mejores que los principios y conceptos establecidos por la generación que hoy conduce a la sociedad. Lo que trato de argumentar es que éstos por lo menos existían.

 

 

La generación de nuestros abuelos le heredo a la generación de nuestros padres un país, chapoteando en la sangre derramada por una guerra que no era nuestra, pero igual la peleamos. No hubo ganadores, sino todos perdedores, como empezó, igual termino (de manera impuesta) vaya tarea que asumió esa generación. Reconstruir una sociedad, reconvertir la visión de Estado y echar a andar un país estancado en sus propios miedos.

 

 

El trabajo se hizo, el construir las bases de la democracia, establecer los nuevos parámetros de convivencia social en paz, se realizo, más conducido e impuesto que por esfuerzo propio. Lo importante es que se hizo o por lo menos se empezó a construir.

 

 

Pero en la actualidad enfrentamos un verdadero problema o crisis de valores en nuestros liderazgos, no se atrevieron a tomar las decisiones correctas para poder construir un país más justo y menos desigual que el que tenemos ahora; realizaron un buen trabajo en acallar los fusiles y la confrontación en nuestra guerra, pero asesinaron la lucha de ideas, la confrontación en el debate, la preparación de verdaderos lideres, olvidaron los conceptos básicos de Patria, proyecto político, Estado, bien común, representatividad, participación e hidalguía y orgullo en el ejercicio del poder que radica en los demás y no en el líder.

 

 

Estamos en un momento histórico importantísimo, es necesario que una nueva generación de guatemaltecos, de izquierda, derecha, social demócratas, social cristiano o cualquier otra ideología intervengan en el escenario, con la convicción de mejorar la tarea, con la necesaria autosugestión de regresar principios, honorabilidad y decisión a la figura de liderazgo. Impulsar decididamente el bien común hacia los más pobres, hacia los desprotegidos por este sistema egoísta, individualista, manilargo de la dignidad humana.

 

 

A la generación que ahora esta conduciendo, le agradecemos el país que han construido, porque sin duda es un mejor país que recibieron, pero creo que es momento de construir las condiciones necesarias para que la nueva generación retome poco a poco el control de la conducción de la patria.

 

 

Hacer esto es preparar un camino honroso y digno hacia el reconocimiento histórico en el futuro, donde se les recuerde como una generación que recibió una patria en ruinas y entregaron una patria en construcción. De lo contrario sus hijos y sus nietos volveremos a tener que reconstruir piedra sobre piedra la patria que debemos construir y mantener de una vez por todas.

 

Jorge Mario Huertas de la torre

 

http://irreverenciachapina.blogspot.com/